Cuando nos disponemos a entregar un detalle a una persona especial debemos capturar su esencia en cada detalle, buscar que aspectos del mundo son propios de ella e indagar cuanto del mundo podemos depositar en un detalle para que este sea el vivo reflejo de esa persona, por ello entreguémosle esta caja decorada que contiene unas flores llenas de cariño y ternura como el corazón de nuestra persona querida, con unos chocolates tan dulces como su ser junto con un vino que demuestra lo exquisito que es con el pasar de los años y con una tarjeta que diga lo que nuestro corazón quiere gritar.